Con defensores así, el patrimonio histórico tiembla

Hoy el Colegio de Arquitectos me dedicó una afectuosa solicitada donde ¡dos veces! remarcan que no he sido fiel al espíritu de lo que ellos quisieron transmitir en una nota que les hice el viernes 8 de septiembre. Objetan un recuadro donde aparecen las fotos de dos edificios junto al título "Así, no". La idea era mostrar cómo avanzan las torres edificadas en pequeños terrenos y sin ningún criterio estético. La cuestión es que el arquitecto de una de estas obras se ofendió y prometió acciones judiciales al colegio. EL presidente del colegio de arquitectos y la comisión de preservación del patrimonio que durante la nota había hecho referencia a este problema (sin dar direcciones, ni mencionar ninguna obra en particular, lo aclaro) para desligarse de cualquier brete aseguran en la solicitada que mi nota no ha sido fiel porque -en una atribución que al parecer excede la profesión- he osado publicar la foto de dos edificios ...y sus direcciones!!!! Uno de los edificios citados, el de la calle Buenos Aires ha sufrido el desmoronamiento de una de las paredes y afecta seriamente las casas vecinas... además está construido de tal forma que el frente es mucho más angosto que los laterales (todo sea por aprovechar al máximo hasta la tierra de las macetas). La otra foto muestra el edificio de calle maipú y buenos aires que se está levantando prácticamente encima de otro (el famoso "PAquete de yerba", en honor a su forma cuadrada y sosa). La solicitada dice además que no comparte la valoración que ha hecho el periodista. En otras palabras, la comisión de defensa del patrimonio (sí, todo con minúscula) avala este tipo de emprendimientos. Resumiendo, donde el periodista infiel dijo "Así, no", debiera haber puesto "Así, sí"... ergo que la comisión de arq está de acuerdo con el crecimiento indsicriminado de torres. O tal vez no está de acuerdo, siempre que el periodista tenga el buen gusto de decirlo sin mencionar ningún caso, por las dudas que alguien se ofenda.

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